Medicina
Biológica y Orthomolecular
La medicina
antiage tiene como objetivo prevenir y combatir los signos y síntomas del
envejecimiento. Es decir, conservar la vitalidad de las personas mediante
terapias que les permiten verse y sentirse sanos y jóvenes.
A pesar de que el principal motivo de consulta suelen ser las alteraciones
estéticas, las terapias antiage logran un equilibrio total en el paciente
provocando repercusiones a nivel orgánico, energético y sexual.
Un tratamiento orthomolecular comienza con un diagnóstico exhaustivo del
paciente para poder conocer cuáles son los puntos de desequilibrio del paciente
y qué nutrientes específicos está necesitando su organismo. En función de estos
resultados, se diseña una terapia integral a medida para producir una reacción
biológica de equilibrio y restauración.